Las dos veterinarias no saben muy bien qué hacer. Por supuesto que pueden curar a un perro, o un caballo. Pero un caso así nunca se les había presentado. Suelen cuidar a mascotas, jamás habían lidiado con un animal tan salvaje. Así que en el documental The Tale of Silyan, de Tamara Kotevska, presentado fuera de concurso en el festival de Venecia, se entregan a intentonas erráticas. Primero, buscan respuestas en vídeos de internet. Luego, se aferran a una ocurrencia: le sirven comida para gatos. Acaba, cómo no, escupida. Finalmente, se les agotan las opciones. No tienen respuestas para el buen hombre que vino a pedir ayuda. Al revés, le despiden con una pregunta: