Una jornada de control y vigilancia tuvo lugar en la comuna 11 de Medellín, como parte del Plan Cazador, estrategia coordinada entre la Alcaldía y la Policía Nacional. La intervención se concentró en el sector de Laureles, donde se desarrollaron acciones preventivas y operativas en distintos puntos del territorio.
Durante la actividad fueron verificados los antecedentes de ciudadanos y se realizaron inspecciones a motocicletas. En total, se llevaron a cabo 798 registros personales y se revisaron 103 vehículos, lo que derivó en la inmovilización de 27 motocicletas por infracciones a las normas de tránsito. Además, se aplicaron 39 comparendos y se incautaron 14 armas blancas.
Cinco personas fueron capturadas por distintos delitos. Entre ellas, un hombre requerido por orden judicial por un caso de feminicidio agravado ocurrido en 2017. También fueron detenidos otros ciudadanos por presuntos hechos relacionados con hurto a vivienda, tráfico de estupefacientes y alteración de placas de identificación en motocicletas.
La intervención, en la que participaron más de 60 uniformados pertenecientes a diferentes unidades policiales, se desarrolló con patrullajes y puntos de control estratégicamente ubicados. Estas acciones hacen parte de una ofensiva que busca limitar el accionar de redes criminales y mejorar las condiciones de seguridad en distintas comunas de la ciudad.
Las autoridades reiteraron que este tipo de operativos continuarán ejecutándose en distintos sectores del Valle de Aburrá con el propósito de mantener la presencia institucional y fortalecer los entornos de convivencia ciudadana.