En la reunión más políticamente cargada de la que hay memoria, la Reserva Federal cumplió el guion previsto y acordó este miércoles en Washington un recorte de 0,25 puntos, el primero desde diciembre y el primero también desde que está en la Casa Blanca Donald Trump, un presidente que ha roto las reglas del decoro con sus presiones a Jerome Powell. Estas han incluido insultos y amagos de despido; todo con el fin de lograr que se pliegue a sus deseos de bajar los tipos y, así, mitigar el golpe de su heterodoxa política comercial. Las tasas quedan tras la reunión de septiembre en la horquilla del 4%-4,25%.