Estée Lauder prevé un aumento de las ventas este año, lo que supone un primer indicio de que los planes de reestructuración del nuevo director ejecutivo están empezando a dar sus frutos. La propietaria de marcas como Clinique, Mac o La Mer, prevé un crecimiento orgánico de los ingresos anuales de entre el 0% y el 3%, frente al 1,9 estimado en una encuesta de Bloomberg. Este ritmo supondría un cambio radical con respecto al descenso del 8% en las ventas del ejercicio fiscal que acaba de finalizar.