Los californianos conocen Camarillo por ser una ciudad de las afueras, al norte, a una hora de carretera desde Los Ángeles, zona de trabajo y residencial para miles de personas. Lo más célebre de la misma son unos enormes outlets, pero además es sede de la Universidad Estatal de California —por su cercanía a las Islas del Canal, lugar privilegiado de estudio del océano— y es lugar de plantación, al tener multitud de granjas y terrenos. De hecho, en Camarillo está ubicada una de las mayores granjas de cultivo de cannabis —legal en California— de todo el mundo, con casi 50 hectáreas, la llamada Glass House Farms, que tiene otra sede unos 50 kilómetros al norte, en la ciudad de Carpinteria, muy cerca de Santa Bárbara. Y precisamente en ambas granjas, en la mañana del jueves, los agentes de inmigración y fronteras, o ICE, realizaron duras redadas contra los trabajadores de las mismas.