Vestido de negro, sin corbata y con una media sonrisa que no esconde del todo la gravedad del momento, Diego Luna tomó el lugar de Jimmy Kimmel como presentador invitado del famoso Jimmy Kimmel Live. Este lunes en Los Ángeles, el actor mexicano se ganó todos los aplausos de la audiencia al anunciar que era su primera vez conduciendo un programa en inglés, su segundo idioma. Pero algo en su mirada anticipaba que esta vez no se trataría solo de comedia. Miró a la cámara y dijo: “Esta noche quiero hablar sobre un tema importante que está ocurriendo aquí en Los Ángeles y en todo Estados Unidos. Con todo lo que está pasando en este país respecto a la inmigración y las políticas autoritarias de Donald Trump, no es poca cosa que un mexicano esté presentando un programa tan importante”.