Cayó en El Dorado un fugitivo que burló a las autoridades por 27 años

Foto cortesía.

Un operativo coordinado entre agencias de seguridad nacionales e internacionales concluyó con la captura de uno de los fugitivos más buscados de Colombia.

William Hernando, quien permaneció prófugo durante casi tres décadas, fue detenido en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá tras ser deportado desde Estados Unidos, poniendo fin a una extensa evasión de la justicia colombiana.

El implicado, condenado por el homicidio agravado de su esposa Laura y el intento de homicidio de su propia hija en 1994, había logrado construir una nueva identidad en territorio estadounidense.

Los hechos criminales ocurrieron el 19 de junio de aquel año en el municipio de La Estrella, Antioquia, cuando William le disparó a su esposa, en repetidas ocasiones, causándole la muerte. Su hija, al intentar intervenir, también fue herida gravemente.

La fuga del homicida comenzó en 1995 cuando ingresó ilegalmente a Estados Unidos a través de la frontera mexicana. Su estrategia para evadir la justicia incluyó asumir una nueva identidad bajo el nombre de Carlos Alberto Rendón y contraer matrimonio con una ciudadana estadounidense en 1998, lo que le permitió obtener residencia permanente legal.

El caso dio un giro decisivo en 2020 cuando el prófugo, confiado en su impunidad, solicitó la naturalización americana presentando documentación fraudulenta. Este procedimiento activó los protocolos de verificación de identidad, revelando la verdad oculta por décadas.

La comparación de huellas dactilares con registros proporcionados por la Policía Nacional de Colombia confirmó que se trataba del mismo individuo buscado por homicidio.

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La cooperación internacional resultó fundamental en este caso. El 13 de abril de 2022, agentes del FBI y oficiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) capturaron al sujeto en Massachusetts, tras localizarlo en el suburbio de Belmont cuando se dirigía a su trabajo en Waltham.

Tras tres años de procesos legales en Estados Unidos, William fue finalmente deportado a Colombia, donde investigadores de la DIJIN e INTERPOL lo esperaban en El Dorado para ejecutar la orden de captura pendiente desde hace 27 años.

El Juzgado Séptimo Penal del Circuito de Medellín había condenado originalmente a William a 45 años de prisión, pena que fue readecuada en febrero de 2021 a 28 años y 6 meses.

El sentenciado fue puesto a disposición del Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de Medellín, que ordenó su reclusión en el Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Bogotá, conocido como La Picota, donde finalmente cumplirá su condena tras décadas de evadir la justicia.

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