Bolivia girará este domingo hacia la derecha con la elección de un nuevo presidente que, por primera vez en 20 años, no pertenecerá al Movimiento al Socialismo (MAS), el partido del expresidente Evo Morales. La primera vuelta electoral celebrada en agosto dejó fuera de carrera a las opciones progresistas y hoy se verán en las urnas el liberal conservador Jorge Tuto Quiroga —que va por su cuarto intento presidencial— y el centroderechista Rodrigo Paz, un candidato que partió de cero y logró seducir al electorado indígena que quedó huérfano de representación.