“Un poeta” en Colombia: entrevista con Ubeimar Ríos, el profesor que saltó al cine

hace 1 mes 25

En vísperas del estreno en Colombia de Un poeta, filme del director antioqueño Simón Mesa Soto, conversamos con Ubeimar Ríos Gómez, profesor rionegrero que se convirtió en protagonista de cine interpretando al entrañable Óscar Restrepo.

La cinta, que ya fue premiada en Cannes, el Festival de Cine de Santiago de Chile, el Festival de Cine de Melbourne y el Festival de Cine de Lima, llega hoy a salas de cine del país y promete conquistar también al público local.

  • “Podría ser cualquier colombiano”

    Ubeimar, bienvenido. ¿De qué trata esta película y qué puede esperar el público que vaya a verla?

    Muchas gracias por la invitación, hermano. Esta película es una tragicomedia, pero también tiene mucho de comedia, de drama, de esas cosas que nos sacuden en la vida. Lo que cuenta Un poeta es, en esencia, la historia de un hombre común, un profesor de Literatura que en su juventud escribió y recibió ciertos reconocimientos, pero que con el tiempo se fue apagando. Es alguien que podría ser cualquier colombiano, alguien que conoció el brillo del talento pero también la frustración del olvido. En medio de su vida aparece una estudiante con un enorme talento poético que no quiere saber nada de la poesía, y allí empieza una relación llena de contradicciones, ternura, desencuentros y hasta humor. La película es como una radiografía de lo que somos en Colombia: nuestras familias, nuestras ilusiones, nuestros fracasos y también nuestras risas.

    La cinta ya tiene varios premios internacionales, entre ellos en Cannes y Lima. ¿Qué significado tienen para usted estos reconocimientos?

    Son un motivo de orgullo enorme. Imagínese uno, un profesor de Rionegro que nunca pensó en estar en la pantalla grande, y de repente ver que la película gana un premio del jurado en Cannes, cuatro en Lima, dos en Chile y uno en Australia… eso es muy grande. Yo creo que es un esfuerzo colectivo: Simón Mesa Soto es un director con una sensibilidad muy especial, y el equipo se entregó de lleno. Hicimos más de dos meses de ensayos antes del rodaje, después cinco semanas intensas filmando, y cada persona puso lo mejor de sí. Entonces cuando llegan los premios uno lo siente merecido, pero sobre todo siente alegría porque el trabajo fue reconocido. Para mí, y creo que para todos, es un mensaje de que se puede hacer cine desde Antioquia con calidad mundial.

    Usted no es actor profesional, ha sido docente toda su vida. ¿Cómo asumió ese reto?

    Eso sí fue un reto grande. Al principio lo que hice fue dejarme guiar, hermano. En los ensayos previos Simón y el equipo me enseñaron ejercicios actorales, maneras de entender el guion, de meterme en la piel de Óscar. Yo no quería improvisar ni hacer algo a medias; tenía claro que había que trabajar duro. Me dediqué a estudiar el libreto, a aprender cada palabra con seguridad, y sobre todo a estar abierto a lo que me dijeran. Fue un ejercicio de humildad: escuchar, obedecer, aprender. Y creo que eso se nota en la película. La gente me dice que se siente auténtico, que el personaje convence, y esa es la mayor recompensa.

    ¿Hubo momentos divertidos en el rodaje?

    Muchísimos. Desde ver cómo Simón mismo actuaba para mostrarnos cómo quería una escena hasta compartir con un equipo humano que se volvió casi familia. Y bueno, hubo cosas chistosas: yo no sé manejar carro, y en la película tenía que hacerlo… entonces ahí se armó toda una situación para que pareciera real, y eso nos sacó carcajadas. Era muy bonito porque la tensión del rodaje se equilibraba con esos momentos de humor.

    ¿Cómo llegó usted al proyecto?

    Eso fue casi de casualidad. Un sobrino de mi esposa, que es amigo de Simón, le contó de mí, de mi manera de ser, de que tal vez podía encajar en el personaje. Me invitaron a un casting y fui sin muchas expectativas, hermano. Al tiempo me llamaron a otro casting ya con guion en mano, y finalmente me escogieron. Fue una sorpresa enorme y una alegría inmensa, porque uno no se imagina que la vida lo ponga en estos caminos.

    En redes sociales ya circulan memes sobre la película y sobre el personaje de Óscar. ¿Cómo los ha tomado?

    Con mucho humor. Yo creo que la gente se identifica con el personaje porque en casi todas las familias hay alguien así: un artista frustrado, un soñador que no logró lo que quería, pero que igual sigue siendo parte del paisaje afectivo de la casa. Cuando la gente se ve reflejada, aparecen las bromas, los memes… y yo mismo me río. Al comienzo me sentí un poco ridículo, pero después entendí que eso es parte de que la película conecte.

    Después de la premier en Bogotá, ¿qué viene para la película y para usted?

    Lo inmediato es volver a la docencia, hermano, porque me dieron solo tres días de permiso. Pero también siguen viajes: festivales, entre ellos uno en Egipto, y seguramente nuevas proyecciones internacionales. Yo por ahora sigo en mi rol de profesor, ya cerca de la pensión, pero no le cierro la puerta a la actuación. Esta experiencia me dejó con ganas de seguir explorando.

    Finalmente, ¿dónde y cuándo podrán ver los colombianos Un poeta?

    El preestreno fue el 26 de agosto en Bogotá, en Cine Colombia del Titán Plaza. El 28 de agosto tuvimos la función especial en Viva Envigado, también para invitados. Y ahora sí, desde el 30 de agosto, el público podrá verla en salas comerciales: en Medellín arrancamos en Procinal Las Américas, en Rionegro en Cinemas Procinal, y también en Royal Films de La Ceja. La idea es que desde el 28 la película empiece a circular en muchas salas del país. Ojalá la gente la acompañe, porque más que un estreno es una invitación a mirarnos en el espejo de lo que somos.

    ***

    En el Oriente antioqueño podrá verse en Procinal Viva La Ceja y Procinal San Nicolás en Rionegro. En Medellín estará disponible en Cine Colombia (Envigado, Molinos, Oviedo, Santafé, Vizcaya y Unicentro), Cinemark (El Tesoro y Arkadia), Procinal Medellín (Mayorca y Las Américas), además de escenarios culturales como el Colombo Americano y el Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM).

    En las páginas web de estos lugares ya podrán comprarse las entradas, con precios que van desde los 7 000 pesos, y está disponible en diferentes horarios.

    Leer el artículo completo