Hace ya casi tres años que Lisa Marie Presley, la única hija del célebre Elvis Presley, fallecía de manera repentina en Los Ángeles. Apenas tenía 54 años y, como se supo después, fue una muerte natural, por complicaciones causadas por un bloqueo intestinal. Durante este tiempo, la figura ausente de Lisa Marie ha estado en el centro de la polémica por su herencia, que ha provocado una cierta tensión entre su madre, Priscilla Presley, y su hija mayor, Riley Keough, que finalmente se convirtió en la gestora absoluta del patrimonio de su madre. En estos años, la figura de Priscilla, en cambio, se ha visto algo empañada por esos problemas legales y económicos.