Al “mejor Gobierno de la historia” argentina le está costando llegar en buena forma a las elecciones legislativas del 26 de octubre. La campaña de la ultraderecha se ha vuelto un camino tortuoso. Javier Milei ha entregado su suerte a un rescate financiero de Estados Unidos, mientras los mercados no dejan en paz al peso argentino y castigan la deuda del país sudamericano temoroso de una cesación de pagos. La política tampoco da buenas noticias a Milei. El principal candidato de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires, José Luis Espert, reconoció, obligado por las evidencias, que había recibido 200.000 dólares de un empresario preso por narcotráfico cuando intentó ser presidente, sin éxito, en 2019. El viernes por la noche, Espert se reunió con Milei cuando arreciaban los rumores de un inminente paso al costado. “No me bajo nada”, desafió el candidato en las redes sociales, un mensaje que el presidente respaldó con un reposteo.